Año tras año, tal día como hoy renace un continuo rebullir de deseos en los que se pide la mejor forma de vida posible, esta noche la entraña de la fiesta guarda relación con el sentido del trabajo, el esfuerzo humano y el resultado del amor. Hoy parece que hemos dado todo el amor posible, que todo lo que oímos era verdad, que todo lo que vivimos fue libertad, que todo lo contemplado fue bello, que todo lo que disfrutamos fue bueno. La vida se carga de expectativas para un mañana.
Si hiciéramos un repaso rápido por las noticias negativas de este año, no las que nos depara la vida sino las que brotan del corazón humano, podríamos ver la abundancia de culpables, personas que nos han decepcionado, aquellos a los que un día respetamos y que para nosotros ya no son de confianza, el que roba, el que engaña, la autoridad que reparte oportunidades sociales por amistad y sin méritos, el que fraudulentamente se beneficia de..., largo sería el listado por no hablar de la atracción de los sexos, que cada vez degenera en más crueldad, con planes para convertir al otro en instrumento, frases que consiguen hacer daño, promesas que se rompen, secretos que se descubren, defectos que se ridiculizan.., así lo es para muchas personas que andan por el mundo como perros perdidos sin collar.
Van a pensar que no tengo sentido del humor, que soy un poco "aguafiestas" al considerar que hay muchas maneras de disfrazar los temores en este circo, pero no, soy consciente de que ser feliz es una ciencia y que con alegría la vida se inunda de sentido. La fiesta la podemos comprar, la alegría no, la que según Antonio Machado consistía en tener salud y la mollera vacía.
Si damos un repaso por las cosas positivas que han sucedido este año hay mucho que decir, todos tenemos a alquien que nos anunció la llegada de un nuevo hijo, el amigo que te hizo una visita inesperada, la persona que nos llamó para decirnos que había encontrado trabajo a pesar de la difícil situación. Este año hubo quien se enamoró, quien se fue para siempre dejando un recuerdo imborrable en los suyos, quien escuchó cosas bonitas, quien ganó un desafío, quien se recuperó de una enfermedad y quien se relacionó con todos, sin condiciones.
Hoy no se tapen los ojos y los oídos, vivan la fiesta sin culpabilidad colectiva, la noche es jocosa y sus protagonistas, héroes que no han advertido la tragedia. Permanezcan en vigilia para ver despuntar el nuevo día, yo hago caso a Tagore, él me enseñó que la felicidad está en todas partes, "en el invierno gris, en el azul sereno del cielo, en la carne viva que anima nuestro cuerpo.....". Mañana ese nuevo día será un tiempo que sigue abrazado a la eternidad y nosotros seguiremos sin poder adivinar los posibles derroteros de la historia, si mañana todo fuera diferente, transformado, con personas renovadas, un año que naciera para volver a hacer las cosas que nos parece mentira que pueden hacerse para bien.
Esta noche, alejados de los problemas de este mundo, sin lápiz y papel, sin limitaciones ni tristezas, encerrados en campanas de cristal, desearemos alcanzar lo que no tenemos y el futuro se nos convertirá mañana en presente, con sus luchas y trabajos. Hoy sólo es una pequeña tregua que nos atrapará con ruido, serpentinas, confetti y aroma de domingo.
Acariciénse el alma, tóquense la piel, compartan el mundo, derrochen dulzura, rían con sonoridad y miren con fantasía.