Faltan tres días exactos para el Carnaval, que si en un principio éste gana la batalla será Doña Cuaresma quien imponga su cordura sobre el mundo cristiano. Celebrar las viejas costumbres es algo que me gusta y para cumplir con el ritual esta mañana llevé al trabajo unos "preñaos". En fila estábamos al inicio del carnaval con este jueves lardero, una fecha de mucha tradición. De modo que en Zaragoza podemos quedar en las riberas del río Ebro con familia y amigos a comer, eso si el tiempo acompaña pero sin excesos que nos hagan tomar una manzanilla antes de acostarnos para "asentar" nuestro estómago. Esta tarde a eso de las 7 podemos acudir al Auditorio en el que como todos los años el Ayuntamiento ofrecerá longaniza para todos los ciudadanos que quieran posteriormente quedarse en la verbena. Lo cierto es que la foto que hice hoy muestra estos "preñaos" que me recuerdan al chorizo a la sidra típico de Asturias.
Jueves lardero se celebra la semana anterior al miércoles de ceniza y se hace con tortas, bollos, panes, es día de irse al monte, de meriendas, de llevar un bocadillo de longaniza, serán distintas variantes según el lugar pero al fin, lo mismo. Hay que ver a Luis, mi compañero de trabajo con tan buen apetito y a Sheila que también es como yo, todo nos sienta bien, sin pensar en el colesterol, ni en dietas. Hoy cualquiera me hubiera seguido y no por mis encantos sino por el olor a pan recién hecho y algo más que se dejaba adivinar por los cortes de la masa, mientras yo les hablaba que este día ya aparece en el Libro del Buen Amor del Arcipreste de Hita, ayer mismo lo consulté para cerciorarme de este auto sacramental medieval.
A media mañana discutíamos sobre la palabra "lardero" procedente de lardo, sebo o manteca o del latín "lardum" (grasa). Mi jefe como buen galeno relacionó la palabra con algunas patologías médicas y Teresa fue al diccionario y así nuestra conclusión final dejó claro que se alude a la costumbre de comer carne y tocino los días anteriores a la Cuaresma y su periodo de abstinencia.
En Cataluña se come butifarra. En Soria se dice: " jueves lardero, chorizo y huevo" o "chorizo entero". Si nos ceñimos a lo que acontece en Aragón veremos que en algunos pueblos además de comer longaniza, se mide, a eso se le llama comer "el palmo", es decir, tomamos una ristra y cortamos un palmo de longaniza, lo que mide tu mano y se pone en un panecilo con su tortilla, se saca del adobo o simplemente se fríe en la sartén.
Aquí este fin de semana los personajes van a ser: El Rey de gallos, La Mojiganga, Carnestolendas y el Conde Salchichón. Por algo mi abuelo a los espectáculos cómicos en la plaza del pueblo les llamaba mojigangas.
Esta fiesta popular es básicamente una jornada al aire libre donde la gastronomía tiene un papel muy importante, ya que esta tradición se inició para marcar la tanda de días en que había que aprovechar para ponerse las botas de carne, a fin de poder aguantar durante toda la Cuaresma sin probarla. No sé quien la comería porque hubo tiempos en que la pobreza obligaba a largos ayunos de carne, quizás por eso se hizo virtud de una necesidad y se quiso que padecieran la misma necesidad los que vivían en abundancia, bonita y justa forma de igualarlos.
Pues es importante que las tradiciones se mantengan arraigadas y fuertes, ese es el espiritu de un pueblo. En cuanto a la foto; vaya pintorra de buena que tienen esos preñaos recien sacados del microhondas, en el monte o en el campo junto con una buena bota de vino...el mejor manjar jeje, un fuerte abrazo desde Reinosa Loli.
ResponderEliminarAmigo seva, si estuvieras más cerca te regalaría un par de bollos para que los comieras en familia, estaban deliciosos. Ya puedes ver lo mucho que nos cuidamos que para eso arrimamos el hombro cuando hay que trabajar.
ResponderEliminarNo sé si vosotros por Cantabria celebráis este día ni de qué manera, ya nos contarás.
El fin de semana prometo hacerte una visita a tu blog. Un abrazo.