foto de la presentación del grupo.
foto de un momento de la actuación
Esta tarde el público ha disfrutado mucho de esta vivencia en directo llena de color y alegría, no en vano se ha definido como un espectáculo armónico, estimulante, profundo y ancestral con raíces en la tradición del pueblo y la cultura mandinga.
Esta noche en la bóveda del Albergue de la calle Predicadores, 70, bajo el lema de “músicas enganchadas” hemos asistido al concierto de Makumba beat, el motivo por el cual recibe el nombre de enganchadas procede del Gancho, un barrio zaragozano.
Aruma ha sido el grupo invitado, es un grupo de Zaragoza de percusión africana, danza y canto a ritmo tradicional del África occidental. Lo dirije Mustapha Djabaye y consta de 4 bailarinas y 7 percusionistas.
Los protagonistas, Makumba Beat, un grupo multiétnico de inmigrantes senegaleses que surgió en Zaragoza, fundado por Lamine; Ibrahim toca la kora y de la coreografía se encarga Cheikh; los fines principales de aquel momento fueron sus celebraciones privadas, hoy es uno de los pocos que existen con fin artístico dentro de la percusión y la danza africana. Llevan diez años de un intenso trabajo dentro de la eliminación de fronteras y el diálogo intercultural y en este grupo hay músicos tanto africanos como aragoneses. Hoy se puede decir con rotundidad que la reputación de su carrera musical es sólida.
Aruma ha sido el grupo invitado, es un grupo de Zaragoza de percusión africana, danza y canto a ritmo tradicional del África occidental. Lo dirije Mustapha Djabaye y consta de 4 bailarinas y 7 percusionistas.
Los protagonistas, Makumba Beat, un grupo multiétnico de inmigrantes senegaleses que surgió en Zaragoza, fundado por Lamine; Ibrahim toca la kora y de la coreografía se encarga Cheikh; los fines principales de aquel momento fueron sus celebraciones privadas, hoy es uno de los pocos que existen con fin artístico dentro de la percusión y la danza africana. Llevan diez años de un intenso trabajo dentro de la eliminación de fronteras y el diálogo intercultural y en este grupo hay músicos tanto africanos como aragoneses. Hoy se puede decir con rotundidad que la reputación de su carrera musical es sólida.
Esta tarde el público ha disfrutado mucho de esta vivencia en directo llena de color y alegría, no en vano se ha definido como un espectáculo armónico, estimulante, profundo y ancestral con raíces en la tradición del pueblo y la cultura mandinga.
foto del público asistente
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